Corría el año 1719 cuando en estos terrenos, el caserío Ayete servía como Cuartel General del duque de Berwick durante las Guerras Carlistas. Una curiosidad es que este lugar también era zona de paso de los peregrinos del Camino de Santiago en aquellos tiempos.
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Corría el año 1719 cuando en estos terrenos, el caserío Ayete servía como Cuartel General del duque de Berwick durante las Guerras Carlistas. Una curiosidad es que este lugar también era zona de paso de los peregrinos del Camino de Santiago en aquellos tiempos.
Aquel caserío permaneció durante 159 años, hasta que la finca fue comprada por por los Duques de Bailén en 1878, quienes levantaron en su lugar el neoclásico Palacio de Ayete. Con sus más de 74.000 m2 de jardines, esta “choza” fue residencia de los reyes de España: Isabel II, Alfonso XII, María Cristina y Alfonso XIII, hasta la construcción del Palacio de Miramar en 1893. Poco después la propia duquesa de Bailén regalaría esta finca a su amiga la reina María Cristina.
Años más tarde, ya en 1940, el espacio fue recuperado por el Ayuntamiento abonando el equivalente a 5.100 euros y poniendo el lugar a disposición del dictador Francisco Franco, a quién todos los veranos de la época se le podía ver por este Palacio. Tras su deceso, los jardines fueron abiertos al público un 20 de julio de 1977.
Una importante rehabilitación acometida en 2010, lo convirtió en el lugar perfecto donde perderse toda una tarde por sus jardines. Además, podrás encontrar aquí un Centro Cultural, la Casa de la Paz, zona de juegos infantiles, un bar-restaurante… y muy buen rollo vital.
